Compitiendo con una Computadora – Ep. 18

En este nuevo episodio de Charla Legal, me di a la tarea de intentar desarrollar el cómo nos veríamos si compitiéramos con una computadora.

Como punto de partida, me refiero al episodio 3 de la temporada 4 de The Office.

Ustedes se estarán preguntando ¿Qué tiene de especial este episodio? Pues en este episodio la compañía de papel Dunder Miffling lanzó su e-commerce con el cual buscaban vender más papel gracias a la autogestión que podían hacer sus clientes.

En él, vemos como Dwight Schrute, quien pasaba por una tusa, se pone como meta superar a la página web.

Este episodio se llama Dwight vs. The Computer. Además, me gusta que le dan un toque muy terminator ya que entre Pam y Jim elaboran una broma en la que se hacen pasar por la computadora e insertar en Dwight la idea del apocalipsis por las máquinas.

Dentro de su fantasía y el objetivo que tenía, era evidente el esfuerzo que debía hacer Dwight para lograr vender más que la página web de la compañía y luego de esforzarse durante toda una jornada laboral, apenas logró vender 50 resmas de papel más que dicha tienda virtual.

Además, la tienda no tuvo que incurrir en estrategias más allá de exhibir el producto, establecer un precio y el mecanismo de pago, en cambio a Dwight le tomó toda una serie de estrategias que van hasta el ofrecer envío gratuito para lograr las ventas.

Aquí, me planteo dos desafíos que quise desarrollar en este episodio y es uno, el hecho de casar la discusión a veces absurda de personas vs computadoras además con criterios que no son semejantes entre ellos, algo así como lo que te dice un experto en fútbol cuanto le pides que compare a Messi con Cristiano, parecen más distintos a pesar de las semejanzas.

Como segundo desafío está en el hecho de poder comprender todo lo que nos tocaría hacer para intentar ser igual de productivo que una maquina en vez de aprovechar sus virtudes, sus ventajas para maximizar la producción de manera completa, con todos los cambios que pueda acarrear dentro de una compañía.

Pero no les cuento nada más, dejo que el resto lo escuchen …